Visita guiada a la Cueva Negra y Cueva del Rey Moro
CUEVA NEGRA (CARAVACA)
Cueva Negra, abrigo situado en el Estrecho de la Encarnación, presume de albergar en su interior algunos de los restos de civilización humana más antiguos de Europa: concretamente restos de fuego y un hacha de mano de hace unos 900.000 años.
Los trabajos de excavación en la cueva se llevan a cabo cada mes de julio desde el año 1990. A lo largo de estas 26 campañas arqueológicas, además de estos hallazgos que la han convertido en un referente internacional para el estudio de la evolución humana, también han sido recuperados diversos dientes de Homo Heidelbergensis: una especie europea evolucionada de los Homo Erectus y precursora de los Neandertales, habitadores estacionales de la cueva.
La antigüedad del yacimiento queda probada, además, por los restos de fauna hallados en Cueva Negra, alguna de ella extinta ya en el Pleistoceno Medio. Muchos de estos restos fósiles están siendo analizados en diferentes universidades españolas y extranjeras
En cuanto a los restos de fauna fósil hallados en Cueva Negra se encuentran marcadores animales muy concretos que aseguran la antigüedad del yacimiento, entre ellos, los restos de la cornamenta de un cérvido extinto pertenecientes a un megaloceros, un ciervo de una especie muy antigua y el ancestro de linajes que se separaron después, durante el Pleistoceno Medio, o los dientes de un roedor muy similar a los hallados en Atapuerca en la Gran Dolina, anteriores y posteriores a los 780.000 años.
Actualmente, muchos de los restos fósiles hallados en Cueva Negra se encuentran en estudio, en diferentes universidades españolas y extranjeras analizándose, por diversos sistemas, los líticos, los huesos, los fitolitos o el polen, en busca de sustancias y elementos orgánicos que aporten toda la información científica necesaria para conocer a fondo el yacimiento y sus moradores paleolíticos.
CUEVA DEL REY MORO
La cueva del Rey Moro, declarada Bien de Interés Cultural, se sitúa en el Estrecho de La Encarnación de Caravaca, a escasos 50 metros de Cueva Negra.
Se trata de una cueva fortificada, única en la región y de las que se conocen muy pocas en España, construida en un abrigo natural presumiblemente en torno al siglo XIII. Situada estratégicamente justo en el lugar donde se estrechaba el antiguo camino que unía Andalucía con el Levante, parece ser que esta cueva se usaba como punto de pago del portazgo; es decir, del impuesto que gravaba los derechos de tránsito para aquellos que iban de camino, pisaban terreno del rey o del señor o entraban en la ciudad.
La construcción se compone básicamente de un muro de argamasa de unos diez metros de altura que cierra casi en su totalidad la abertura del abrigo. En él pueden observarse las saeteras desde las que los ballesteros y arqueros defendían la fortificación. En sus paños interiores se aprecian señales de los rollizos de madera que sostenían la techumbre, hoy desaparecida. En el entorno, además, pueden verse restos de escalones y piletas tallados en la roca.